El dolor que trae la ausencia: Triste extraño a mi madre muerta
Un vacío imposible de llenar
La pérdida de un ser querido es un dolor que se graba en lo más profundo de nuestro ser, dejando un vacío que parece imposible de llenar. Cuando ese ser querido es nuestra madre, el dolor se intensifica y el sentimiento de tristeza se vuelve aún más abrumador.
El amor de una madre es único e incondicional. Es una presencia constante en nuestras vidas que nos brinda amor, protección y cuidado. Cuando esa presencia se desvanece, nos encontramos con una tristeza profunda y un sentimiento de extrañeza que nos acompaña en cada paso que damos.
Recuerdos que se hacen poemas
En mi desesperación por encontrar consuelo en medio de la tristeza, encuentro refugio en la poesía. A través de las palabras, puedo expresar mis sentimientos y darle voz a ese extrañar constante que siento hacia mi madre fallecida.
Cada verso se convierte en un pedazo de mi alma que comparto con el mundo, en un intento de honrar la memoria de mi madre y sanar mi corazón herido. Me sumerjo en la nostalgia y evoco recuerdos que se hacen poemas, donde describo la belleza de su sonrisa, la calidez de sus abrazos y la dulzura de su voz.
Ejemplo 1:
Oh madre querida, extraño tus manos suaves,
Que al rozar mi rostro, me regalaban calma.
Tu risa resonando en el aire,
Como música que ahuyenta cualquier drama.
Ejemplo 2:
En el silencio de la noche,
El eco de tu voz resuena en mi mente.
Como un susurro cálido y reconfortante,
Que me envuelve en un abrazo ausente.
Ejemplo 3:
Las lágrimas son testigos de mi dolor,
Porque el amor de madre no conoce fronteras.
La ausencia deja un hueco en mi corazón,
Un vacío que nada ni nadie llena.
En cada latido, en cada verso
La tristeza de extrañar a una madre muerta no desaparece con el tiempo, sino que se transforma en una parte inherente de nosotros. Aprendemos a vivir con ese dolor, a llevarlo en cada latido y en cada verso que escribimos.
En cada poema, encuentro consuelo y la certeza de que el amor de mi madre sigue vivo en mi corazón. A pesar de la tristeza, encuentro en la poesía una forma de mantener su recuerdo vivo y honrar el amor incondicional que me brindó.
Extrañar a una madre muerta es una herida que nunca se cierra por completo, pero a través de la poesía, encontramos una forma de sanar poco a poco y mantener viva su memoria en nuestro ser.
Poemas relacionados